Livercare es un complemento que puede ser consumido por jóvenes mayores de 16 años y adultos, siempre y cuando un experto o especialista así lo haya determinado. Por esta razón, es recomendable hablar previamente con el doctor tratante o nutricionista a fin de concluir si realmente es necesario añadir Livercare a la dieta alimenticia. Livercare es uno de los pocos complementos que está indicado única y exclusivamente a la mejora de la función hepática. Por ello, cada vez se acrecienta las recomendaciones de su consumo. Livercare es utilizado fundamentalmente como tratamiento de desintoxicación, limpieza y mantenimiento del hígado en un estado saludable. Un hígado sobrecargado de toxinas puede ocasionar agotamiento en el cuerpo, lentitud y sensación de hinchazón.

Ingredientes:Cardo mariano (Silybum marianum), semilla en polvo 500 mg, Diente de león (Taraxacum officinale), raíz en polvo 200 mg, Curcumina [cúrcuma Curcuma longa)], polvo 200 mg, Alcachofera (Cynara scolymus), polvo 200 mg, Agracejo (Berberis vulgaris), raíz en polvo 200 mg, Colina (dihidrógeno citrato) 200 mg, Inositol 200 mg, Taurina 200 mg, Metionina 200 mg. Agentes de carga (celulosa microcristalina, fosfato dicálcico), estabilizante (acacia), agente de recubrimiento [polivinilpirrolidona (PVP)], antiaglomerantes (ácido esteárico vegetal, estearato de magnesio vegetal).
Apto para vegetarianos.

Dosis: Livercare debe ser consumido de forma oral. La recomendación es ingerir de 2 a 4 comprimidos de forma diaria (la cantidad dependerá del estado actual de tu función hepática, la cual determinará tu médico tratante). La ingesta del complemento nutricional deberá realizarse, preferiblemente, acompañada de un vaso con agua, durante las comidas principales del día, siguiendo una dieta rica en nutrientes y proteínas. Evite superar la dosis diaria recomendada.

Precauciones de uso:
Precaución: Antes de tomar este producto consulte a su profesional de la salud si está intentando quedarse embarazada, está embarazada o en lactancia, o está tomando medicación.
Los complementos alimenticios no deben usarse como sustitutos de una dieta equilibrada ni de un modo de vida sano.
No superar la dosis recomendada.
Mantener fuera del alcance de los niños más pequeños.